La depresión a veces se manifiesta de manera diferente en hombres y mujeres, también a lo largo de la vida, pero siempre es
necesario identificarla para buscar tratamiento, aquí algunas de estas
diferencias y también los tipos más comunes:
- Depresión grave, la persona tiene cinco o más síntomas depresivos, que no le dejan llevar una vida normal para trabajar, dormir, estudiar, comer o disfrutar de la vida. Una depresión grave incapacita a la persona y requiere atención inmediata.
- Depresión después del parto, por lo menos una de cada 10 mujeres que tienen un bebé, padece depresión grave el primer mes después de dar a luz.
- Distimia, es una depresión leve pero de larga duración que puede durar hasta dos años o más si no se trata, los síntomas permiten llevar una vida más o menos normal, pero no dejan que la persona se sienta bien.
- Trastorno bipolar, no es tan frecuente como la depresión grave o leve, llama la atención porque se combinan estados de mucha actividad y buen ánimo con otros de tristeza.
Depresión en las
mujeres
La depresión es más
común en las mujeres que en los hombres por factores biológicos,
hormonales, emocionales y sociales que son únicos para el sexo femenino. Las
hormonas afectan directamente la sustancias químicas del cerebro que regulan
las emociones y el estado de ánimo. Un ejemplo son los síntomas depresivos
graves en muchas mujeres alrededor de la ovulación y antes de la regla.
Otras mujeres
tienen una carga de estrés muy grande que favorece la depresión al tener que
sobrellevar los problemas y tensiones del trabajo, las responsabilidades en el
hogar, el cuidado de los hijos y padres ancianos, y a los que todavía se suman
maltrato, pobreza o problemas con la pareja o familia.
Depresión en los
hombres
Los hombres pueden
sentir más su depresión como cansancio, enojo fácil o perdida del interés en lo
que antes gustaba; las mujeres por su parte expresan más tristeza, sentimientos
de inutilidad o culpa excesiva. Por otro lado los hombres abusan más del
alcohol cuando se sienten deprimidos y desalentados.
Depresión en los y
las adultas mayores
La depresión no es
algo normal con el envejecimiento, la mayoría de las personas mayores se
sientes satisfechas con sus vidas aún con enfermedades y dolores físicos. El problema en esta etapa de la vida es que los
síntomas son menos evidentes y los adultos mayores pueden no querer reconocer
sentimientos de tristeza o de pena frente a los demás o ante sí mismos. Es
necesario estar al pendiente ya que la respuesta al tratamiento con
medicamentos, psicoterapia o una combinación de ambos mejora considerablemente
la depresión y la calidad de vida.
Niños y
adolescentes
Una niña o niño con
depresión puede no querer ir a la escuela, ser muy miedoso, o estar preocupado
de que sus padres mueran, estar de mal humor, ser negativo o irritable y
sentirse incomprendido. En los y las
adolescentes la depresión puede asociarse con ansiedad, trastornos alimenticios, adicción
a drogas y aumentar el riesgo de suicidio. Es importante poder detectar la
depresión en niños y adolescentes y tratarla para que no persista y se prolongue
hasta la vida adulta.
Causas de la depresión
Un factor importante es el hereditario, las hijas e hijos de personas son más propensos a padecer depresión, otros factores son:
- La adicción al alcoholismo y otras drogas
- Enfermedades como el cáncer, todas las que causan dolor intenso y prolongado, estrés crónico, insomnio e hipotiroidismo
- Medicamentos como los esteroides
- Algunos eventos como la violencia familiar, abuso sexual, muerte de familiares o amigos, ruptura de relaciones con la pareja, divorcio de los padres, enfermedad en la familia, pérdida del trabajo y aislamiento social que es una causa frecuente en adultos/as mayores
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